BETUNIZER

Lo primero saludaros a todos. Hemos vuelto, así que de nuevo van a volar los insultos, las opiniones subjetivas y la contradicción que enfrenta a la dolorosa sinceridad con la falsa condescendencia. Pero ese es nuestro problema, así que al tajo.

Betunizer son un trío de especialistas en eso de fabricar bombas iónicas con forma de canción. Entre el hardcore y el rock experimental, entre el punk psicótico y un búfalo vengativo y asfixiado dándose de cabezazos. Sus componentes han tocado en La orquesta del caballo ganador, Zener, Estrategia lo capto!, Salchicha o Rastrejo, entre otros. Como Betunizer ya han realizado conciertos por toda España y dos giras europeas. Hace no mucho debutaron con Quien nace para morir ahorcado nunca morirá ahogado. Esto todos lo sabíamos.

Entonces me pongo a leer críticas y observo, en general, que muchos se ven sorprendidos por un disco que en su primera escucha te descoloca y en las segundas audiciones comienza a atraparte con un caos ordenado, con una amalgama entrópica en la que los detalles comienzan a perfilar un universo ruidoso y atrapante. Potencia. Hostias. Shock.

Leo otras en las que se dice que su primer disco va decayendo con el paso de las canciones, que la últimas parecen atropelladas por la pasión desmedida, por la carnalidad desproporcionada y los galopantes sonidos electrificados y percutidos del grupo.

Los más intelectuales, o mejor informados, citan a Thomas Fuller, de quien Betunizer coge la cita que da nombre a ese primer disco. Algunos dicen que es una obra maestra, otros que es un disco simplemente correcto. Todos coinciden en que los directos del grupo de la ciudad de la luz, del PP, de los delitos de cohecho y del despilfarro del dinero público son su punto fuerte.

Entonces imprimo todas esas críticas, hago de vientre y me limpio con esos din A4 de papel reciclado. Porque en mi opinión todo eso mezclado, aturullado u ordenado, pero directo al cráneo, es Beunizer. Y todo eso está en su primer disco. Correcto.

Me sorprende que algunos comenten que al principio el disco es difícil de escuchar, cuando no hay tiempo para la dificultad o la simpleza, cuando es una bomba iónica que estalla en micras de segundo. 25 minutos de explosión, para ser exactos. Y cuando acaba tienes la sensación de que 20 años de música y ruido te han reventado en la cara en apenas unos segundos. Me sorprende que esto descoloque puesto que esa sensación es la que me hace considerar que un disco o un grupo es bueno, y no la mierda danzante y tediosa que inunda tantos programas de radio o tantos medios musicales de prensa escrita. Me sorprende haber visto, el año en el que salió este disco que por ejemplo Mondosonoro, la gran bazofia cósmica de amiguismo y la parcialidad, el gran ente de la música comercial disfrazada de underground, lo situara en el puesto 12 de los mejores discos de la Comunidad Valenciana, y que por ejemplo, valoren en su número 182 el disco Fiesta de La Bien Querida, la que nos roba horas de sueño y cuyos discos se van volando con el viento, en el puesto 6 de los mejores discos nacionales. Y como esta revista otras muchas. Creo que el de Betunizer debería de haber estado en el puesto 12, pero de los mejores discos nacionales del año.

Parece que es difícil el objetivismo en un mundo de géneros y de modas. Difícil abrise camino si no chorreas melodías facilonas de músculo pocho y pop de lágrima fácil. Aún así, que Betunizer es un grupo que te pega una hostia musical en los huevos y sabe más de música que multitud de grupos que llenan las frecuencias de radio, es algo indudable. Y si la crtítica musical es subjetiva y nos permite establecer premisas cuya realidad es cuestionable según el lugar de la ecuación en el que nos situemos, entonces les digo que si no les gusta este grupo, es que no tienen ni idea de música.

A continuación les dejo un vídeo de Betunizer grabado por nuestros cámaras en Madrid. El material de una de las dos cámaras se jodió, por lo que el vídeo, que podía haber sido un bonito montaje, se ha convertido en un tedioso plano secuencia. Lo sentimos, pero es lo que hay. Por otro lado podéis ver al principio del vídeo a Tom Bennet, un artista revival experimental tropicalista sintetizador y desfasado (bendito desfase) que en el 2010 editó el disco Trash boogaloo. En otros tiempos miembro de uno de los sellos del buen ruidismo madrileño GrandMoffworks. Salud!




En octubre graban su segundo disco Boogalizer, en los estudios Ultramarinos Costabrava con Santi García.

PROXIMOS CONCIERTOS DE BETUNIZER:

BETUNIZER + SIMON SCOTT @ Les Ateliers Claus
(Brussels, BELGIUM)

BETUNIZER + MR PROTECTOR @ Molodoi
(Strasbourg, FRANCE)

BETUNIZER @ La Residencia
(Valencia, SPAIN)

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